Los ojos son órganos muy delicados, sin embargo, frotarse los ojos incluso con fuerza es una práctica común y repetida casi automática por niños, adolescentes y adultos que a largo plazo puede afectar nuestra salud visual.
¿Por qué nos frotamos los ojos?
Todos nuestros sentidos se hallan alerta y a nuestra disposición, pero la vista se esfuerza durante todo el día. Para leer, escribir, dibujar, limpiar, cocinar, y mucho más necesitas la vista, sin embargo, pocas veces nos fijamos en qué está pasando con nuestros ojos.
El picor de los ojos es consecuencia de la sequedad de estos, que puede producirse por varios factores, como la disminución de la frecuencia en el parpadeo, conjuntivitis, ácaros y más.
Al frotar los ojos se siente cierto alivio y descanso, pues se estimulan las glándulas lacrimales, humedeciendo un poco los ojos, pero al hacerlo con mucha fuerza o constantemente con el tiempo puede tener consecuencias bastante negativas.
¿Cómo se pueden afectar nuestros ojos si no eliminamos esta práctica?
Al frotarnos los ojos frecuentemente se va deteriorando la piel de los párpados que es sumamente delgada y se pueden romper pequeños vasos sanguíneos acelerando el proceso de envejecimiento, además de la aparición de bolsas y ojeras.
Incluso ante la presión constante y fuerte la córnea puede resultar severamente afecta. Por si fuera poco, al tomarlo como una costumbre las manos pueden estar sucias, introduciendo virus y bacterias por los lagrimales.
Además, si la presión es mucha y constante, con el tiempo el cristalino e incluso la córnea pueden llegar a verse seriamente afectados, lo que puede hacer que la vista llegue a disminuir, e incluso en casos de prurito frecuente a perderse.
Cuando te frotas los ojos a veces se ven ciertos destellos. Estos se producen porque el sistema ocular permanece más activo excepto los fotorreceptores de la retina.
Dicha reducción sucede porque frotase los ojos reduce el flujo sanguíneo hacia el cerebro y los foto receptores se desordenan y se desubican, enviando mensajes no apropiados rápidos y continuos mientras suspendes el hecho de frotarte la vista.
¿Cómo evitar frotarse los ojos?
Si con frecuencia sientes la necesidad de frotarte los ojos, esta acción se habrá vuelto una costumbre un tanto difícil de erradicar, mientras controlas el reflejo y te vuelves consiente de no hacerlo más.
Para mejorar la molestia en tus ojos intenta mejor pestañear varias veces, si tienes picazón constantemente puedes utilizar lágrimas artificiales, son productos que se pueden adquirir sin receta, y funcionan a la perfección para quitar la piquiña de los ojos.
También puedes ir al oftalmólogo, ya que, si sientes la necesidad constante de frotarte los ojos, cabe la posibilidad de que sea una alergia a un patógeno presente en tu hogar.
El polen, el polvo, incluso las mascotas pueden producir esta sensación, si eres alérgico será necesario alejar estos elementos que disparan la piquiña, así que lo mejor será pestañear cuando sientas molestias e ir al médico lo más pronto posible.
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